La evaluación de una persona afectada puede llevarse a cabo por la solicitud de un paciente en particular, o por algún profesional de la salud que requiera este tipo de pruebas. Por esta vía, la persona a ser valorada sigue un procedimiento que conlleva la realización de 3 pasos.
Los investigadores y/o grupos de investigación de diversas áreas pueden acceder a estas herramientas y servicios para la realización de sus proyectos de investigación o ensayos clínicos. Así, TMAP ofrece a la comunidad científica un servicio de valoración sistemática que entrega como resultado una colección de datos para ser analizados estadísticamente.
El funcionamiento neurocognitivo de la personas permite que éstas desarrollen su actividad diaria con normalidad. Cuando alguna función cognitiva se ve alterada, puede repercutir en la vida del paciente en distintas áreas y diferentes niveles.
La Unidad TMAP lleva a cabo evaluaciones clínicas y neurocognitivas integrales, además de asesorar a las personas afectadas y a sus familiares.
El paciente que llega a la Unidad TMAP solicitando una evaluación de su funcionamiento cognitivo pasará por un proceso que integra tres pasos. Este procedimiento queda registrado en un Informe Clínico que se le entregará como resultado de su evaluación.
La evaluación neurocognitiva se puede llevar a cabo por la solicitud de un paciente en particular o por algún profesional de la salud que requiera este tipo de pruebas. Está indicada en pacientes con alteración de las funciones cognitivas, o trastornos mentales tales como:
La Unidad de Evaluación TMAP cuenta con distintas herramientas que pone a disposición de investigadores y sus áreas de trabajo. La evaluación neurocognitiva es un servicio más que TMAP ofrece en este área, factible de ser aplicada en temas de investigación como la farmacología, discapacidad, demencia, epidemiología, rehabilitación, entre otros.
La evaluación funcional basada en las pruebas biomecánicas proporciona información cuantitativa y objetiva de la repercusión funcional que tiene una patología en las actividades y funciones de una persona, convirtiéndose en una herramienta más para el personal sanitario en el control de las deficiencias funcionales del sistema músculo-esquelético.
La Unidad TMAP ha adquirido para este servicio las pruebas de evaluación funcional diseñadas por el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV). Estas pruebas están pensadas para asistir al especialista en el proceso de evaluación de la capacidad para realizar una actividad o función. Es posible objetivar, mediante la comparación con bases de datos de personas con funcionalidad normal y alterada, la alteración funcional de un paciente.
Este grupo de técnicas son inocuas y no invasivas, lo que posibilita hacer una evaluación con avanzada tecnología de un modo simple y sencillo.
El paciente que llega a la Unidad TMAP solicitando una evaluación de su funcionamiento cognitivo pasará por un proceso que integra tres pasos. Este procedimiento queda registrado en un Informe Clínico que se le entregará como resultado de su evaluación.
La valoración biomecánica es un servicio más que TMAP ofrece como servicio. Su aplicación es factible en múltiples temas de investigación.
La evaluación funcional biomecánica se puede llevar a cabo por la solicitud de un paciente en particular o por algún profesional de salud que requiera este tipo de pruebas. Está indicada en diversas áreas:
La valoración biomecánica es un servicio más que TMAP ofrece como servicio. Su aplicación es factible en múltiples temas de investigación.
El sistema TOBII es un sistema que permite el registro y análisis de la mirada que se puede utilizar como un instrumento de evaluación y rehabilitación. Este tipo de tecnología puede aportar información en diversos campos de conocimiento como interpretación de la conducta humana, estudio de respuesta de consumidores y la psicología. A través de una serie de ejercicios de estimulación visual y textual, es posible caracterizar la respuesta visual de la persona valorada ante estos estímulos, identificando una estrategia visual.
El paciente que llega a la Unidad TMAP solicitando una evaluación de su funcionamiento cognitivo pasará por un proceso que integra tres pasos. Este procedimiento queda registrado en un Informe Clínico que se le entregará como resultado de su evaluación.
Consiste en determinar el patrón visual de una persona frente a una pantalla con un contenido determinado que puede ser seleccionado o diseñado a voluntad del objeto de estudio. El protocolo establecido incluye pruebas de reconocimiento de colores, formas y compresión de textos; sin embargo se pueden introducir nuevas pruebas para evaluar la atención de la persona valorada sobre un campo específico de interés.
La tecnología Eye Tracking se basa en el seguimiento ocular de una persona para determinar un patrón de comportamiento visual. Esta tecnología consiste en el uso de cámaras llamadas eye-trackers que proyectan rayos infrarrojos sobre la pupila del ojo de la persona valorada, sin necesidad de contacto físico. Esto permite monitorizar y registrar la forma en que una persona mira una escena o imagen, en qué áreas fija su atención, durante cuánto tiempo y qué orden sigue en su exploración visual.
Mediante la identificación de “áreas de interés” es posible determinar variables como: número general de fijaciones, porcentaje de tiempo de la mirada en cada área de interés, duración media general de la fijación, número de fijaciones en cada área de interés, duración media de la mirada en cada área de interés, ratio de fijación general (fijaciones).